El pollo picante con cous cous es un plato que fusiona sabores mediterráneos y asiáticos, creando una experiencia culinaria única. Este delicioso platillo no solo es colorido y atractivo, sino que también es muy fácil de preparar.
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Con la combinación perfecta de pollo tierno, verduras frescas y un toque de especias picantes, cada bocado es una explosión de sabor que te transportará a tierras lejanas.
Para preparar el pollo picante con cous cous, empiezo organizando todos los ingredientes y utensilios necesarios. A continuación, os detallo los pasos que sigo para asegurar un plato delicioso y bien equilibrado.
Ingredientes
Para el pollo:
- 2 pechugas de pollo
- 1 cucharada de pasta de curry
- 1 cucharadita de salsa picante (ajustar al gusto)
- 1 cucharadita de cúrcuma
- Sal al gusto
- 2 cucharadas de aceite de oliva
Para el cous cous:
- 1 taza de cous cous
- 1 taza de caldo de verduras hirviendo
- 1 cucharada de mantequilla o aceite de oliva virgen
- Semillas de granada para decorar (opcional)
Verduras:
- 1 pimiento rojo
- 1 pimiento verde
- 1 tallo de apio
- 1 tomate
- 1 cebolla
Preparación del pollo
- Marinado del pollo: Comienza cortando las pechugas de pollo en tiras largas. En un bol, combino la pasta de curry, la salsa picante, la cúrcuma y la sal. Luego, marine el pollo en esta mezcla durante al menos 20 minutos, aunque es ideal dejarlo en la nevera toda la noche para que absorba bien los sabores.
- Cocción del pollo: En una sartén caliente, añado el aceite de oliva y voy incorporando el pollo marinado. Cocino el pollo durante 5 a 6 minutos por cada lado o hasta que esté dorado y tierno. Reserva el pollo en un plato.
Preparación del cous cous
- Hidratación del cous cous: En un bol, coloco el cous cous y vierto el caldo de verduras hirviendo. Cubro el bol con un plato y lo dejo reposar durante unos 5 minutos. Después, añado la mantequilla y, con una cuchara, desmenuzo bien el cuscús para que se mezcle con la mantequilla y esté suelto.
Cocción de las verduras
- Salteado de verduras: En el mismo wok o sartén que utilicé para el pollo, añado un poco más de aceite de oliva si es necesario. Primero, sofrío la cebolla cortada en dados grandes hasta que esté transparente. Luego incorporo los pimientos y el apio, cocinando todo junto durante unos minutos.
- Finalizando las verduras: Agrego el tomate cortado en trozos y sazono al gusto. Si es necesario, puedo verter un poco de caldo de verduras para evitar que se peguen. Cocino durante otros 5 minutos hasta que todos los ingredientes estén bien integrados y tiernos.
Montaje del plato
Servir: Para presentar el plato, coloco una porción de cous cous como base en un plato, luego añado el pollo y las verduras salteadas encima. Decoro con semillas de granada para un toque de color y frescura.
Información Nutricional
Al disfrutar de mi receta de pollo picante con cuscús, es importante tener en cuenta su valor nutricional. Este plato no solo es delicioso sino también equilibrado. A continuación, presento una tabla con los valores nutricionales por porción:
Nutriente | Cantidad por porción
|
---|---|
Calorías | 284 kcal |
Grasa total | 3 g |
Carbohidratos totales | 22 g |
Proteínas | 50 g |
Cada porción contiene un significativo aporte de proteínas gracias a la pechuga de pollo, lo cual es ideal para una dieta equilibrada. Las grasas son limitadas y los carbohidratos provienen principalmente del cous cous, que ofrece una fuente de energía saludable. Este plato es perfecto tanto para el almuerzo como la cena y me ayuda a mantener una alimentación variada y nutritiva.
Opciones de proteína
- Alternativas al pollo: Para diferentes variaciones, pruebo con pechuga de pavo o tofu marinado para una opción vegetariana que también queda deliciosa.
- Mariscos: En ocasiones, se puede añadir gambas o salmón para una fusión diferente que también aporta un perfil de sabor interesante.
Salsa adicional
- Salsa de yogur: Me encanta servir el pollo picante con una salsa de yogur a base de yogur griego, limón, y cilantro. Esto equilibra el picante del plato.
- Salsa agridulce: Para un contraste, puedo preparar una salsa agridulce con miel y salsa de soja, añadiendo un toque inusual y sabroso.
Cada una de estas variaciones no solo aporta un giro al plato, sino que también permite adaptar la receta a mis preferencias y las de mis invitados.