Un día cualquiera, vas caminando por la calle y de repente ves una cara que te resulta familiar, te has encontrado a tu mejor amigo del colegio, hacía tiempo que no lo veías y puedes apreciar que está muy cambiado, pues ha perdido peso, su piel tiene buen aspecto, e incluso, lo ves con más vitalidad.
Cuando inevitablemente le preguntas sobre su cambio físico, él empieza a relatar cierto discurso que habla sobre la importancia que tiene «desintoxicar» nuestro organismo después de haber realizado una ingesta insalubre, o incluso, poco interesante a nivel nutricional.
Y claro, si eres una persona que se preocupa medianamente por su salud, ves ese cambio de composición, y además, escuchas una narrativa tan bien relatada sobre «depurar» y mejorar tu calidad de vida. ¿Cómo no vas a interesarte por este tipo de enfoque?
¿Qué es la dieta detox?
Es una ingesta dietética qué se caracteriza ante todo por el consumo de frutas y verduras, las cuales se toman principalmente en forma de zumo.
Además, también se suele caracterizar por introducir grandes períodos de ayuno, mucha agua, y excluir diversos grupos de alimentos, como pueden ser los huevos, cereales, carnes, etc.
Esta dieta o aquellas personas que basan su alimentación de esta forma, argumentan que nuestro cuerpo debe desintoxicarse después de haber realizado alguna ingesta nutricional poco saludable, o incluso, para eliminar las toxinas que puede haber acumuladas en nuestro organismo. Pero…¿Es esto cierto?
¿Funciona realmente?
Depende de a qué nos estemos refiriendo por funcionar. Si de lo que hablamos es si es útil para «depurar» nuestro organismo, la respuesta es clara y concisa, no.
Desde hace miles de años, nuestro cuerpo tiene los mecanismos necesarios para eliminar las toxinas que pueda haber presentes, y es que para eso, la piel, los riñones, el hígado, o incluso, los pulmones, son fundamentales para eliminar esas sustancias nocivas en forma de heces, orina y/o sudor.
¿Crees que el ser humano habría sobrevivido en el paleolítico si hubiese dependido de un zumo de espirulina, espinacas y aguacate para que su organismo funcionase correctamente? Evidentemente, si así fuese no estarías aquí a día de hoy.
Beneficios de hacer la dieta detox
El único beneficio que podríamos encontrar, es que en algunos casos aquellas personas que partan de unos hábitos nutricionales muy malos pueden llegar a ingerir una cantidad un poco más elevada de fruta y verdura en su dieta -independientemente de que el tomar estos alimentos en forma de zumo no sea la mejor opción, en algunos contextos, puede llegar a ser incluso un avance-.
De manera que estas personas podrán obtener una dieta con un contenido un poco más elevado en fibras, vitaminas y minerales. Sin embargo, esto es un arma de doble filo. Y lo vamos a ver a continuación.
Contras y efectos secundarios
Tal y como dice el refrán, «no puedes dejar que los árboles te impidan ver el bosque». Con este tipo de dietas estaremos excluyendo una gran cantidad de alimentos de la misma, lo que nos llevará a generar diversos déficits nutricionales, que a medio-largo plazo pueden generar algún tipo de patología.
Así mismo, utilizar las dietas «detox» para perder peso, lo cual es un grave error, ya que son dietas en las estamos basando nuestra alimentación en zumos -principalmente-, en el momento que tomemos un «break» o reintroduzcamos unos hábitos nutricionales más o menos coherentes y acordes a los de una persona normal y adulta, el efecto rebote será un hecho, y es probable que no solo recuperemos el peso perdido, sino que podemos llegar incluso a aumentarlo.
Además de todo esto que hemos comentado, se suelen relatar los siguientes efectos secundarios:
- Dolor de cabeza.
- Irritabilidad.
- Mal aliento.
- Ansiedad.
O incluso, llegados a cierto punto, fuertes diarreas consecuencia de la excesiva ingesta de líquidos.
No te dejes guiar por la báscula
Siguiendo con la temática de la pérdida de peso, uno de los errores más catastróficos que podemos apreciar cuando intentamos mejorar nuestra composición corporal, es el centrarnos única y exclusivamente en los números de la báscula.
Cuando seguimos una dieta detox, podemos pensar que hemos perdido muchísima grasa, ya que claro, si cuando empezaste a seguir este enfoque nutricional pesabas 2 kg más que ahora… tu composición corporal ha mejorado, ¿no?
La realidad es muy diferente. Seguramente, hayamos perdido grasa, ya que al restringir la gran mayoría de alimentos que podamos consumir hemos creado un déficit calórico. No obstante, en la otra cara de la moneda es muy probable que nuestro masa muscular también se haya visto mermada, principalmente por 2 motivos:
- Una ingesta muy baja de proteína.
- Un déficit calórico súper acentuado.
Ambos problemas son consecuencia de la poca diversidad alimenticia que disponemos, ya que si además de tener una dieta con un contenido proteico tan bajo, añadimos largos períodos de ayuno y alimentos muy poco calóricos, se da el combo perfecto para aumentar el catabolismo muscular.
Tipos de dieta detox
Si sigues leyendo a estas alturas, puede que hayas deducido que no soy demasiado partidario de seguir este tipo de dietas milagro, pues carecen de evidencia científica y pueden llegar a ser muy peligrosas en ámbitos de salud.
Aún así, puede que te resulte interesante el ver la gran cantidad de enfoques y dietas depurativas que hay por ahí, por lo que he recopilado las 3 más aleatorios que he encontrado para que puedas echarles un vistazo.
1. Limpieza maestra
Consiste en una dieta compuesta solo de zumo de limón recién exprimido, sirope de arce ecológico, pimienta, cayena y agua de manantial.
2. Limpieza Yóguica de Kitcheree
Se basa en comer un plato a base de soja verde, verduras cocidas, arroz basmati y especias durante 40 días. Se puede comer fruta dos horas después de haber comido. Y además, se aconseja comer yogurt.
También se pueden incluir algunas especias, entre ellas, las que más destacan son: canela, orégano, azafrán, comino, cilantro, fenogreco, jengibre, hinojo, pimienta cayena, pimienta negra, clavo, perejil y romero.
3. Detox Crudivegano
Se utilizan frutas y verduras crudas ecológicas, combinadas con cantidades más pequeñas de nueces crudas y semillas.
Alternativas a este tipo de dieta
Cómo puedes apreciar, las dietas detox no son precisamente lo que denominaríamos el ‘Santo Grial’ de la gastronomía y de la salud, sino que podríamos deducir todo lo contrario.
¿Qué puedes hacer si quieres perder peso? Lo primero que te recomendaría, es que fueses más conscientes de las decisiones que tomas, y que sean coherentes acorde a lo que quieres.
Siempre he pensado que comer bien no es tan dífcil como crees, un ejemplo es que todos sabemos perfectamente que a modo de snack, una manzana es mejor opción que un donut. O incluso, que beber una botella de agua es mejor opción que un refresco azucarado. Sin embargo, una vez llevamos esto a efectos prácticos, solemos elegir el donut y el refresco.
Si en lo que se refiere a conocimientos de nutrición andas un poco perdido, quizás deberías acudir a un profesional que te pueda orientar. Mientras tanto, te dejo aquí seis pautas básicas para ayudarte a mantenerte sano o incluso a perder grasa.
Mientras tanto:
- Consume suficiente proteína.
- Hidrátate de manera adecuada.
- Lleva una dieta equilibrada y variada.
- Consume varias piezas de fruta y verdura al día.
- Ingiere una cantidad de calorías coherente y acorde a tu actividad física.
- Evita los productos ultraprocesados.